En este año, 2018, la OMS (Organización mundial de la salud) ha decidido publicar el borrador de su próxima edición de clasificación internacional de enfermedades en la que incluyó el «Trastorno por videojuegos» o «Gaming disorder» en inglés.
Este trastorno, que si bien hace referencia al uso de videojuegos en general, tanto con conexión a Internet como sin ella, no habla de un uso eventual sino AL MAL USO y a un deterioro de la calidad de vida. ¿Qué tal?
Lo incluyeron dentro de los «trastornos debidos a comportamientos adictivos» y es que ya nos han oído y leído hablando de las adicciones a las nuevas tecnologías y finalmente al parecer esta ya forma parte dentro de los manuales de clasificación, es decir, quizás dentro de poco tiempo, estaremos diagnosticando a niños, niñas, adolescentes y adultos con este trastorno, pero ¿A qué hace referencia?
Para dejarlo claro, la clave siempre está referida al MAL USO que se hace de estas tecnologías. Al hecho de que como adultos hemos dispuesto de forma indiscriminada un tiempo valioso en el que nuestros chamos pasan muchas horas realizando estas actividades. Veo a muchos padres disfrutando del tiempo libre, queriendo estar más presentes y conscientes, pero también a otros que debido a múltiples causas, desde muy temprana edad introducen estos dispositivos para así mantener calmados a sus hijos.
Existen tres condiciones negativas que refieren estar vinculadas al mal uso de los videojuegos, y te las mencionaré a continuación:
- Falta de control en cuanto a inicio, frecuencia, intensidad y duración del juego. No existe un límite en el tiempo que se le dedica a esta actividad. Puede comenzar a jugar y pasar horas y horas inmerso dentro del videojuego aún cuando había pensado dedicar solo una hora, por ejemplo.
- El juego tiene mayor prioridad frente a otros intereses importantes para la etapa de desarrollo y actividades diarias. En otras palabras, se prefiere el juego de video vs otras cosas como salir a jugar con otros niños la mayoría de las veces. Este es un punto importante, y va referido a que los seres humanos tenemos diversidad de gustos y actividades. En la niñez, especialmente debemos velar porque las diferentes áreas de desempeño estén equilibradas, las tareas, el tiempo libre, de juego, etc etc, si alguna de estas áreas se ve interferida por la preferencia por los videojuegos hay que estar pendiente.
- A pesar de tener consciencia de las consecuencias negativas, se mantienen o aumentan las conductas referidas al juego de video o juegos digitales. La persona tiene dificultad para notar que ha perdido cierto control y además para gestionar un cambio positivo.
Según la OMS la mayoría de las personas no sufren este trastorno, sino que el mismo surge cuando hay conductas graves que deterioran de forma importante el desenvolvimiento de la persona en sus áreas de desempeño: familia, escuela, trabajo, tiempo libre, relaciones sociales, etc.
Me gusta pensar que podemos prevenir al tener información, sin embargo, puede ser fácilmente reconocible que no todos los que disfrutamos de los videojuegos terminamos cumpliendo con esta características. Ante esto, mi idea es exponer que no solo se trata de disponer un tiempo específico para esta actividad (que si es necesario) sino también de proveer sostén emocional, de conectar emocionalmente con nuestros niños, de velar por su seguridad física y psicológica, ya que, el estar en una realidad virtual y ensimismado con videojuegos podría tener un significado con respecto a su deseo de contactar con la realidad ¿Cómo será esa realidad real?
Nota: En la versión final conoceremos si realmente quedó incluido, sin embargo, me gustaría leerlos ¿Qué opinan de esta información? ¿Será que podemos hacer algo para evitarlo?